puede cambiar la caja de arena de forma segura mientras está embarazada, pero es mejor que otra persona haga esta tarea si es posible. La preocupación aquí es la toxoplasmosis, una infección parasitaria que se puede transmitir a través de la caca de gato (como en la arena para gatos o en el suelo al aire libre donde los gatos han defecado).
si tuviste toxoplasmosis en el pasado, generalmente se te considera inmune, lo que puede proteger al feto de contraer la infección., Los Centros para el Control de Enfermedades estiman que alrededor del 20 por ciento de las personas en los Estados Unidos de 12 años o más han tenido toxoplasmosis, a menudo sin siquiera saberlo. La Toxoplasmosis puede causar síntomas similares a los de la gripe en los adultos, pero a veces no hay signos de la enfermedad.
pero si contrae toxoplasmosis por primera vez cuando está embarazada, es posible que se enferme y le transmita la enfermedad a su bebé. Y si un bebé contrae toxoplasmosis en las primeras etapas del embarazo, puede causar defectos congénitos graves, como daño ocular y cerebral.,
Estos posibles efectos suenan aterradores, pero antes de que recurras a regalar a tu gatito, consuélate sabiendo que es muy poco probable que los gatos de interior porten toxoplasmosis. Además, si has estado cerca de gatos por un tiempo, puedes ser inmune. Si le preocupa que pueda tener la afección, pídale a su proveedor que la revise con un análisis de sangre.
si ha sido infectada durante el embarazo, puede ser tratada con medicamentos, pero usted y su bebé tendrán que ser monitoreados de cerca durante el embarazo y después del nacimiento.,
Puede reducir sus posibilidades de contraer la infección durante el embarazo tomando estas precauciones:
- haga que otra persona cambie la arena para gatos – ¡nunca tendrá una mejor excusa!
- Si tiene que cambiar la camada usted mismo, hágalo una vez al día. Toma al menos 24 horas para que la camada se vuelva infecciosa.
- Use guantes mientras cambia la arena para gatos o la jardinería.
- lávese bien las manos después.,
por cierto, las heces de gato no son la única manera de contraer la toxoplasmosis: comer carne cruda o poco cocida, o frutas y verduras que no se han lavado, pelado o cocinado adecuadamente también lo pone en riesgo. Tenga mucho cuidado al lavar y cocinar los alimentos a fondo.