Antecedentes: la amputación digital del dedo del pie es un procedimiento quirúrgico relativamente menor, pero existe una visión histórica de que es la «primera etapa en un curso clínico predecible» que conduce a la pérdida eventual de la extremidad. Hay una escasez de datos contemporáneos sobre los resultados a largo plazo de los pacientes sometidos a amputación del dedo del pie. Nuestro objetivo es estudiar la experiencia de nuestra institución, centrándose en los factores de riesgo para la progresión a la pérdida futura de extremidades, mediante la realización de una revisión retrospectiva de nuestra práctica.,
métodos: se identificaron sesenta y tres pacientes sometidos a amputación del dedo del pie en nuestra institución y se revisaron retrospectivamente las notas clínicas. Se construyó una base de datos de factores de riesgo vascular y comorbilidad y se analizó la correlación con la pérdida futura de extremidades con la prueba de Chi cuadrado y un modelo de regresión logística.
resultados: se identificaron sesenta y tres pacientes con una edad media de 69 años (RIC 62-76, 5). Treinta y cinco (55.,6%) de estos pacientes pasaron a tener una amputación quirúrgica adicional; se realizaron 22 amputaciones mayores (16 por debajo de la rodilla y 6 por encima de la rodilla) y 23 amputaciones menores en total. Cuarenta y tres (68,3%) pacientes tenían diabetes y 31 (49,2%) pacientes se sometieron a uno o más procedimientos de revascularización. Hubo una correlación significativa entre los pacientes que no tenían diabetes y la pérdida futura de extremidades (Chi-cuadrado=4,31, p=0,038), sin embargo, ningún otro factor de riesgo identificado predijo la necesidad de amputación mayor.
conclusión: la amputación del dedo del pie es un predictor significativo de pérdida futura de extremidades., Nuestro estudio identificó que los pacientes con diabetes tienen significativamente menos probabilidades de progresar a una mayor pérdida de extremidades que aquellos con la enfermedad. Planteamos la hipótesis de que esta diferencia se debe al seguimiento más intensivo y multidisciplinario del cuidado de los pies que reciben los pacientes diabéticos. Estos resultados resaltan la importancia de la amputación del dedo del pie y contribuyen a la evidencia de un servicio ambulatorio más intensivo para estos pacientes de alto riesgo.